El papa Francisco avala con su firma esta histórica medida, que no incluye en ningún caso considerar a estas parejas como “matrimonio”
El Vaticano ha aceptado bendecir a las parejas del mismo sexo, los matrimonios civiles y las uniones de hecho. Se trata de una iniciativa histórica recogida en una nueva declaración de la Santa Sede, que es la jurisdicción eclesiástica central de la Iglesia Católica y la representación soberana del papa.
En su primera parte, el texto publicado analiza el origen y sentido teológico del acto de la bendición, revisándolo desde el Antiguo Testamento. A continuación, con un lenguaje claro, hace referencia posibilidad de bendecir a dos personas del mismo sexo que se quieren y que desean compartir su fe con la Iglesia y la comunidad de católicos.
La medida ha sido avalada por el papa Francisco, quien continúa con el proceso de apertura que comenzó hace varios años. El Pontífice ha intentado mostrar una actitud más cercana y dialogante con las bases de fieles. Con esta declaración, reconoce y acoge dentro de la Iglesia a parte del colectivo LGTBIQ+, que durante años ha estado apartado de ella.
Solo hace un par de años, en 2021, la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF), encargada de emitir este tipo de documentos, alegó que la Iglesia católica no podía impartir su bendición a las uniones de personas del mismo sexo. Por eso hablamos de un cambio de rumbo muy importante.
No obstante, el mensaje de la Santa Sede es tajante al subrayar que estas parejas en ningún caso podrán ser consideradas matrimonio, entendido como la unión de un hombre y una mujer.
Iglesia católica y colectivo LGTBIQ+
El catolicismo es una rama del cristianismo y una de las religiones con más seguidores del mundo: se calcula que hay más de 1.370 millones de personas bautizadas en la fe católica, según Vatican News, el portal oficial de la Santa Sede. Por ese motivo, las decisiones de la Iglesia Católica tienen una gran repercusión a nivel mundial.
No obstante, la sociedad ha evolucionado en las últimas décadas. Han aparecido nuevos movimientos e ideologías que han desplazado a la religión como centro de la vida y han planteado nuevas dudas, inquietudes y reivindicaciones sociales. Es el caso de los derechos del colectivo LGTBIQ+.
La relación entre la Iglesia y el colectivo LGTBIQ+ sigue siendo un tema de debate. El Catecismo de la Iglesia Católica, libro que contiene la doctrina cristiana, sostiene que las personas homosexuales deben ser tratadas con respeto y compasión, pero también afirma que los actos homosexuales son “intrínsecamente desordenados”.
A lo largo del tiempo, algunas personas dentro de la Iglesia Católica han abogado por un enfoque más comprensivo y compasivo hacia las personas del colectivo. Sacerdotes y religiosos han expresado públicamente su apoyo a la comunidad LGTBIQ+ con el objetivo de que también sean reconocidos en la Iglesia.
En los últimos años, el papa Francisco ha sido uno de los que ha ido ampliando su discurso. Sin embargo, la Iglesia Católica, como institución con una larga historia, valora la conservación de la tradición y los cambios introducidos suelen ser evaluados cuidadosamente para evitar divisiones internas.
El Papa Francisco @Pontifex_es ha impulsado una reforma del #sínodo para que las mujeres puedan votar por primera vez. ¿En qué consisten estos encuentros de obispos y religiosos? ¿Qué decisiones se toman sobre la Iglesia Católica? 👇https://t.co/IndbSzYakh
— Junior Report (@JuniorReport_) April 28, 2023
Discurso del papa Francisco
El debate sobre el tratamiento que debe tener la Iglesia con las parejas homosexuales ha generado varios conflictos internos desde que el papa Francisco fue elegido en 2013. El Pontífice ha ofrecido una visión más aperturista de aceptación en la última década, aunque en ningún momento ha llegado a equiparar estas parejas a las heterosexuales.
En 2020, apoyó las uniones entre personas del mismo sexo y aseguró que tenían derecho a formar una familia. En 2021, pidió a padres y madres que acompañen a sus hijos que tienen una “orientación sexual diferente”. A principios de 2023, comunicó que las personas trans podían ser bautizadas, al igual que a los bebés de parejas el mismo sexo.
Este tipo de cambios son fundamentales. La Iglesia, que tiene una gran repercusión a nivel mundial, está enviando un mensaje de inclusión y aceptación. El apoyo y la integración de todas las personas, independientemente de su identidad de género u orientación sexual, es un paso crucial para proteger sus derechos humanos.
