Recopilamos una serie de obras culturales con perspectiva de género que promueven la igualdad entre mujeres y hombres
La cultura es un reflejo de la sociedad en un momento determinado. Históricamente, películas, series y libros han sido además un reflejo del patriarcado, es decir, una sociedad desigual donde la figura del hombre predomina y la mujer aparece mayoritariamente invisibilizada.
La desigualdad de género se encuentra en aquellas obras donde prevalecen los protagonistas hombres y las historias se cuentan desde un punto de vista masculino. Pero también está en la parte técnica: los grandes productores, guionistas y directores cinematográficos son, en su mayoría, hombres.
Para evaluar la brecha de género en la cultura, la dibujante Alison Bechdel creó en los años 80 el Test de Bechdel. Según este método, la obra analizada debe cumplir varios requisitos para ser considerada igualitaria: tener al menos dos personajes femeninos, que ambas tengan nombre, que hablen entre ellas y que la conversación trate de algo distinto a un hombre. Los datos muestran que hay una gran desigualdad de género en el mundo del cine.
Por eso es importante conocer y difundir obras culturales que ofrecen una representación más justa e igualitaria entre hombres y mujeres, incorporando la perspectiva de género. A continuación recopilamos algunos ejemplos.
Películas
Las sufragistas (2015) es una película británica dirigida por Sarah Gavron. El largometraje se centra en la historia de las sufragistas, que impulsaron el movimiento a favor del voto femenino en Reino Unido entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX.
Thelma y Louise (1991) cuenta la historia de dos mujeres: Thelma, que es ama de casa, y Louise, que es camarera. Con el objetivo de alejarse de su rutina y comenzar una vida nueva, deciden hacer un viaje por carretera. La película es un canto a la libertad femenina y la sororidad.
Una película para entender el importante papel de las mujeres en la ciencia es Figuras ocultas (2016). Cuenta la historia de tres científicas afroamericanas que trabajaron en la NASA a principios de la década de 1960. Su papel fue decisivo en la carrera espacial cuando todavía había leyes que discriminaban a la población negra en Estados Unidos.
La película Jeanne Dielman, 23 quai du Commerce, 1080 Bruxelles (1975), dirigida por la directora belga Chantal Akerman, muestra la rutina doméstica de una mujer con todo detalle. El objetivo es denunciar la opresión que sufren muchas mujeres que no han tenido otra alternativa que convertirse en amas de casa. Recientemente fue elegida la mejor película de la historia.
Series
El cuento de la criada (2017-) es una serie basada en una novela de Margaret Atwood que cuenta la vida en Gilead, una sociedad totalitaria que sufre despoblación a causa de la contaminación ambiental. Las pocas mujeres fértiles que quedan son forzadas a la esclavitud sexual para repoblar el mundo.
Para entender la realidad a la que se enfrentan las víctimas de agresiones sexuales está Creedme (2019), la historia de Marie Adler, una chica que denuncia una violación. La joven es acusada por las autoridades de haber puesto una denuncia falsa, pero contará con la ayuda de dos mujeres detectives para sacar la verdad a la luz.
Unorthodox (2020) cuenta la historia de Esty, una joven que pertenece a una comunidad judía ultraortodoxa en Nueva York. Allí sufre una serie de restricciones y menosprecios por el hecho de ser mujer. Un día decide huir a Berlín para alejarse de su estricta comunidad y buscar su verdadera identidad.
Una serie que refleja el papel de la mujer en deportes masculinizados es Gambito de dama (2020). La protagonista, Beth Harmon, lucha por convertirse en la mejor ajedrecista del mundo. Durante la serie tratará de derribar las barreras del mundo del ajedrez profesional, dominado tradicionalmente por los hombres.
Libros
Si preferimos la literatura, también existen obras culturales con mensajes feministas. Es el caso de Todos deberíamos ser feministas (2014). En este ensayo, la escritora Chimamanda Ngozi Adichie explica qué significa ser feminista en el siglo XXI, analizando el papel de la mujer actual y explicando cómo se podría conseguir una sociedad más justa e igualitaria.
Otro ejemplo es Eres una caca: Guía para entender y desmontar el machismo (2019), de Lula Gómez. La autora recopila algunos argumentos típicos contra el feminismo, como «Ni machismo ni feminismo, ¡igualismo!», y propone una serie de herramientas para desmontar estas actitudes que siguen presentes.
También podemos leer Si es amor, no duele (2017), de Pamela Palenciano. La autora sobrevivió a una relación de maltrato que duró toda su adolescencia y este libro es un testimonio en primera persona de su experiencia como víctima de violencia de género. El texto analiza cómo afecta la idea del amor romántico y los roles de género en las relaciones.
En cómic destaca Feminismo ilustrado (2017), escrito por María Murnau y Helen Sotillo. En esta obra, las autoras recogen ejemplos de actitudes machistas que ocurren en el día a día y aclaran conceptos asociados a la lucha feminista, como patriarcado o micromachismo.
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