Un siglo de animación con Walt Disney Studios

El estudio, fundado hace 100 años, ha sido objeto de críticas por los estereotipos que promueve en algunas de sus películas clásicas

El 16 de octubre de 1923, los hermanos Walt y Roy O. Disney fundaron Walt Disney Studios (aunque en aquel momento se llamaba “Disney Brothers Studio”). Nacía así uno de los estudios de cine y animación más conocidos en la actualidad por su impacto en la cultura popular.

El primer proyecto importante de Walt Disney Studios fue la creación de una serie de cortometrajes de animación llamados Oswald el conejo afortunado. Estos se produjeron para Universal Pictures en la década de 1920, estudio de cine que acabó quedándose con los derechos del personaje.

El conejo Oswald fue un antecesor del personaje más famoso de Disney: Mickey Mouse. Este ratón debutó en el cortometraje Steamboat Willie en 1928, una producción que fue un gran éxito. Marcó el comienzo de la fama y el éxito de la compañía de estos hermanos en la industria de la animación.

Los estudios Disney han destacado principalmente por su innovación. Desarrollaron su primer largometraje de animación, Blancanieves y los Siete Enanitos, en 1937. Más tarde, introdujeron la tecnología de Technicolor en La Cenicienta (1950), un proceso avanzado que ofrecía una reproducción de colores más rica y precisa para la época.

Los estudios se han diversificado económicamente, es decir, han ampliado sus actividades e ingresos más allá de la producción de películas. En 1955, crearon su primer parque de atracciones Disneyland (hoy en día tienen 6 repartidos por todo el mundo). También han adquirido importantes compañías de entretenimiento, como Pixar, Marvel Entertainment (creadores de míticos superhéroes) y Lucasfilm (creadores de Star Wars). 

Su última innovación ocurrió en 2019, cuando lanzaron Disney+, una plataforma de streaming que permite llevar el contenido directamente a los hogares de millones de personas en todo el mundo. 

Las ideas de Walt Disney

Disney Brothers Studio lo fundaron los hermanos Roy O. y Walt. Mientras que Roy O. se encargaba de la parte financiera, administrativa y comercial de la empresa, Walt se centró en toda la parte creativa y de producción. Con el paso de los años, Walt empezó a ganar mucha más popularidad y hoy en día es el creador al que todo el mundo recuerda. 

Walt Disney nació en Chicago en 1901. Desde muy joven le gustó dibujar, así que estudió para convertirse en ilustrador profesional y empezó a trabajar haciendo dibujos de campañas publicitarias y cómics. Pero lo que realmente le apasionaba eran los dibujos animados.

A principios del siglo XX, la industria del cine empezaba a crear las primeras películas de animación. Los grandes estudios cinematográficos estaban en Hollywood, así que los hermanos Disney se trasladaron a California y fundaron lo que hoy conocemos como Walt Disney Studios.

Pero Walt no solo era un dibujante, sino que también era un empresario emprendedor que supo aprovechar el éxito que tuvo su personaje Mickey Mouse para expandir la marca Disney. Por ejemplo, a finales de 1928 comercializó una línea de productos con la imagen del ratón. Fue un innovador en la animación, la tecnología y la narración de historias.

Walt falleció en 1966, pero su legado en la industria del entretenimiento es inmensurable. Hoy en día, The Walt Disney Company (compañía que engloba los estudios de cine, los parques de atracciones y los productos de consumo, entre otros) es una de las empresas de entretenimiento más grandes del mundo. 

Un recorrido por sus películas

Walt Disney Studios ha sido el hogar de algunas de las películas más míticas y queridas de la historia del cine. Desde su primer largometraje, Blancanieves y los Siete Enanitos (1937), los estudios de cine y animación han destacado en la creación de historias inolvidables y llenas de magia.

Walt Disney creó películas con las que millones de niños y niñas de todo el mundo crecieron. Hablamos de largometrajes como Pinocho (1940), Fantasía (1940), Dumbo (1941), Bambi (1942) o La Cenicienta (1950).

Tras su muerte en 1966, la compañía perdió el rumbo durante un tiempo. Pero a finales de los años 80 volvió con grandes éxitos como La sirenita (1989), La Bella y la Bestia (1991), Aladín (1992) o El Rey León (1994), todas ganadoras del Premio Oscar a Mejor Película de Animación.

En la década de los 2000, uno de sus grandes éxitos fue Frozen (2013), que se convirtió en un fenómeno cultural. La historia de las hermanas Anna y Elsa, con la canción Let It Go como himno, se convirtió en un éxito global. La película empoderó a las jóvenes y resaltó la importancia del amor entre hermanos.

Las películas antiguas de Disney han sido objeto de polémica por reproducir ciertos estereotipos. A día de hoy algunas de ellas pueden resultar ofensivas desde el punto de vista de la igualdad de género, los derechos civiles o el racismo. De hecho, Disney decidió retirar algunas de estas películas del catálogo infantil Disney+.

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